En la restauración ha crecido el interés por el cuidado del medioambiente. Una práctica muy necesaria si queremos que el planeta se conserve en buen estado y que la generación de relevo tenga una mejor calidad de vida.
Pero, lo que muchos no saben, es que dentro de la ecología alimenticia hay varios mitos que necesitan ser revisados. Y justamente eso es lo que queremos hacer a través de esta entrada, aclarar esas creencias no tan ciertas y que posiblemente siempre te hacen dudar.
Así que prepárate para conocer 5 mitos ecológicos que te dejarán a ti y a tu equipo del restaurante con la boca abierta.
Tabla de contenidos
Mitos ecológicos: ¿Qué son?
Se trata leyendas sobre el medio ambiente o creencias que se tienen acerca de las actividades ecológicas y que no necesariamente tienen fundamento racional. Es decir, mitos pueden ser creencias erróneas relacionadas a este tópico.
El sector de restauración se ha mostrado interesado en adoptar políticas ecologistas en los últimos años. Sin embargo, primero es necesario conocer qué es cierto dentro de lo que consideramos ecológico y lo qué no.
Eso debido a que es la mejor manera de asegurar una adaptación correcta, donde no haya cabida a errores que la competencia pueda aprovechar.
5 mitos y realidades sobre el consumo de productos ecológicos
Aún existen muchos mitos referentes a los productos ecológicos y en las siguientes líneas buscaremos aclarar 5 de ellos.
1. Los productos “eco” están libres de químicos y pesticidas
Comencemos hablando del mito que establece que los productos de etiqueta ecológica están libres de químicos y pesticidas. Esta es una idea errónea de muchas personas, y vamos a sacarlos de duda de una vez.
La realidad es que los productos ecológicos sí recurren a los pesticidas. De hecho, son necesarios para asegurar que la materia prima llegue sana y en perfecto estado ante las empresas sostenibles pertenecientes del sector gastronómico.
Sin embargo, la diferencia es que los pesticidas usados en las producciones ecológicas presentan componentes naturales. Eso quiere decir que no llevan ningún químico dañino en su composición y están destinados a plagas específicas.
2. Los productos “eco” son más caros
¡Sí! Efectivamente los productos con etiqueta “eco”, “bio” o “natural” tienden a ser más costosos. Esto se debe al proceso de producción complejo al que deben ser sometidos para cumplir con los estándares ecológicos.
No obstante, es un precio que se paga solo debido a la alta demanda de consumidores de productos ecológicos que hay en la actualidad. Es decir, siempre habrá clientes que busquen solo productos ecológicos.
Por lo tanto, las empresas pertenecientes al sector de la restauración no deben temer en adquirir materia prima ecológica. Aunque eso implique un ligero aumento de precio en los platos del menú, ya que la tendencia ecológica atrae más clientes.
3. Los productos “eco” son sostenibles
Otro de los mitos ecológicos es que todos los productos eco son sostenibles: ¿verdad o mentira?
Recordemos que los principios de sostenibilidad ambiental son velar por la conservación de los recursos naturales y el equilibrio entre una especie y sus entornos. Eso significa que un producto es sostenible solo si cumple tales principios.
Lamentablemente no todos los productos ecológicos son sostenibles. Puede que estén comercializados bajo la etiqueta “bio”, pero eso no sirve de nada si es un artículo industrializado y de producción masiva.
Por ejemplo, hay negocios de restauración que adquieren materia prima “eco” para asumir públicamente que están contribuyendo por la conservación del planeta. Pero, eso no sirve de nada si no reducen el impacto negativo de sus operaciones en el ecosistema.
4. Plantar miles de árboles es la solución al cambio climático
Hoy en día, muchas empresas del sector de la restauración se han sumado a la causa de plantar miles de árboles para luchar contra los efectos del cambio climático. Aunque no es una mala idea, puede no ser la solución que necesitamos en este momento.
La realidad es que el cambio climático es un problema de carácter de urgencia, es decir, que necesitamos solucionar inmediatamente. Pero, los árboles tardan mucho tiempo en crecer y se vuelven sumideros de dióxido de carbono.
De hecho, se ha descubierto que las turberas almacenan más CO2 que un árbol común. Incluso, pueden convertirse en sumideros de carbono que ofrecen resultados rápidos, sin tener que esperar a que un bosque reforestado se desarrolle completamente. Otro de los mitos ecológicos.
5. Los fertilizantes naturales son más caros que los químicos
La realidad es que hay nuevos fertilizantes ecológicos accesibles para la industria. Eso es un aspecto beneficioso para los establecimientos del sector restauración, ya que pueden encontrar rebajas en los proveedores con políticas “eco”.
Los fertilizantes naturales presentan mayores beneficios a mediano y largo plazo que los químicos. Especialmente porque minimizan las enfermedades de las plantas y mejoran las condiciones del suelo, incrementando así el volumen de producción.
Es importante que el sector restauración apoye a las empresas proveedoras de productos ecológicos. Esa es una forma de hacer crecer la cadena de negocios concientizados por la conservación del medioambiente.
Reflexión final sobre los mitos en la hostelería ecológica
Los mitos que expusimos en líneas anteriores son la representación de que todavía existen muchas ideas erróneas sobre los productos de etiqueta ecológica. Ideas que pueden generar operaciones erróneas, si no las aclaras a tiempo.
Entender la realidad de estos mitos te permitirá adoptar políticas ecológicas reales en tu negocio de restauración. Primordialmente, porque como empresario de un sector tan competitivo, no puedes arriesgarte a dar pasos en falso. Los productos ECO de Greenuso te echan una mano.
Así que preocúpate por adoptar políticas ecológicas reales, que todos los clientes que pisen tu negocio de restauración noten que realmente están comprometiéndose con la causa. De lo contrario, solo estarías mintiéndote a ti mismo.
Recuerda que vivimos una época donde los empresarios de restauración se enfrentan a clientes más astutos y exigentes. Si atraes un nicho importante por sus políticas ambientalistas y resulta que todo es falso, las consecuencias serán fatales. Así que no arruines tu propia reputación en el sector.
¿Cuéntanos, habías oído hablar antes de alguno de estos 5 mitos ecológicos?